El relato juevero de esta semana es convocado desde el blog JulianoElApóstata, y la consigna es escribir sobre el caso Nisman.
Yo participo con una ficción escrita para la ocasión, protagonizada por un superhéroe llamado Nis-Man.

Nis-Man
por Luciano Doti
Nis-Man era el superhéroe que tenía a su cargo la lucha
contra el crimen en Buenos Aires. Sus colegas Super-Man, Bat-Man y He-Man
habían sido asignados a otras metrópolis del mundo.
Su guarida estaba ubicada en Puerto Madero. Era allí donde poseía
su centro de operaciones con base de datos. Entre la documentación que guardaba, es posible que hubiera cosas que complicaban al Gobierno y a la República Islámica
(teocrática) de Irán.
De civil, Nis-Man era Alberto Nisman, un fiscal que como tal
luchaba por la misma causa que en su carácter de superhéroe, aunque de un modo
más institucional. Precisamente en su calidad de fiscal había sido convocado a
una audiencia en el Congreso de la Nación.
Faltando pocas horas para ello, apareció muerto.
Son varias las conjeturas que pueden hacerse teniendo en
cuenta el calibre de la acusación que realizara oportunamente. Tampoco hay que
descartar que conocieran su identidad oculta, digna de una historieta.
Hoy, como si se tratara de un capítulo del Chapulín
Colorado, nos preguntamos:
<<Y ahora, ¿quién podría ayudarnos?>>