viernes, 27 de noviembre de 2015

El híbrido


por Luciano Doti

A falta de mujer el Zoilo debió conformarse con una oveja. 
Por esas cosas de la genética y probabilidades de una en un millón, el animal quedó preñado. 
Al tiempo nació un becerro medio humano. Para no escandalizar a la gente, lo dejaban salir sólo en las noches; él prefería las de luna llena, ya que bajo la luz selenita podía apreciar mejor el paisaje.
En un paseo nocturno, alguien creyó ver un lobisón.
Ahora, en el pueblo hablan de ese raro ser mitológico, y no entienden por qué bala en lugar de aullar.


2 comentarios:

  1. ¿cuantos lobisones andarán por ahí? ufff.
    Luciano te deseo una Feliz Navidad, espero seguir compartiendo letras.
    Un abrazo.

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  2. A Falta de mujer una oveja uso la Zoofilia. Un saludo

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